Un año nuevo que se acaba, malo en lo deportivo pero bueno en lo institucional y en lo humano. El barco corrió riegos pero los tripulantes que no se bajaron lo lograron sacar a flote y mantener en rumbo: esa fue la mejor lección del año. Un año de muchos cambios, con alegrías y con conflictos, siempre mirando lo positivo. Descubrimos nuevos canteranos que van a estar seguramente durante años, y también, bueno... los veteranos de siempre dando una mano y poniéndole el pecho a las balas. Ese es el mejor resumen del año. Se vienen los tradicionales Ing. Agrim y se viene el asadolfo final (propongan fecha y pónganse las pilas). Por otro año, vamo arriba!!!

Este post sirvió también para sacar la bochornosa foto de Manuel que estaba en primer plano hace una semana y estaba tirando abajo al blog y sus visitas internacionales (jeje).